Diputados de Guerrero proponen exhorto para que presupuesto de “Dos Bocas y Tren Maya” sea reasignado a atención de la emergencia sanitaria
Las Comisiones Unidas de Salud y de Desarrollo Económico y Trabajo del Congreso del Estado analizan una propuesta de exhorto a la Federación para que analicen y determinen la posibilidad de suspender o cancelar los proyectos del “Tren Maya” y la refinería “Dos Bocas”, con el objeto de que sus presupuestos sean destinados a la atención prioritaria de la emergencia sanitaria por Covid-19.
La propuesta de la diputada Guadalupe González Suástegui (PAN) consiste en exponer al titular del Poder Ejecutivo federal y a las cámaras de Senadores y Diputados del Congreso de la Unión, que tomen en cuenta los diversos estudios en la materia y la nueva realidad económica del país.
Del documento dio lectura diputada Perla Edith Martínez (PRD) como integrante de la Comisión Permanente, quien manifestó que al cancelar dichos proyectos y reasignar su presupuesto, se podrá asegurar un ingreso a las familias, proteger el empleo e incentivar a las pequeñas y medianas empresas, así como a la industria turística.
Cuestionó que, en el caso del proyecto regional “Tren Maya”, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) estima que su costo podría ir de entre los 479 mil 920 millones de pesos hasta un billón 599 mil 767 millones de pesos, un rango de cuatro a 10 veces mayor a los 120 y 150 mil millones de pesos estimados por el Gobierno Federal en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024.
En el mismo tema, citó el documento denominado “Diagnóstico IMCO: Refinería Dos Bocas”, que establece que en el 98 por ciento de los escenarios, el proyecto de inversión en la refinería genera más costos que beneficios; “es decir, destruye valor para Pemex”.
Añadió que dichos proyectos regionales sustentados en el Plan Nacional de Desarrollo no contemplaban diversos factores, como el impacto ambiental, la oposición de pueblos y comunidades indígenas de la región, ni el brote del nuevo coronavirus, que constituye actualmente una “emergencia de salud pública de importancia internacional, y lo que es peor, una crisis económica de naturaleza mundial.